El documento describe cómo el hombre religioso ve el mundo como "abierto" y su existencia como "abierta" al mundo. Vive conectado a lo sagrado y santifica actividades cotidianas como comer, tener relaciones sexuales y funciones fisiológicas. Homologa su cuerpo con fenómenos cósmicos como el sol, la luna, los vientos y la tierra. El tantrismo indio ritualiza el sexo como unión sagrada entre lo divino y lo terrenal.